Theodoros II, emperador de Abisinia
En torno a 1855 Theodoros II controlaba las numerosas tribus que conformaban la actual Etiopía y se autoproclamaba emperador de Abisinia. Este hecho supone el inicio de la Etiopía moderna.
En 1862 Theodoros II escribió una carta a la Reina Victoria con el propósito de acordar una alianza contra los turcos, que amenazaban su imperio desde Sudán. La falta de respuesta por parte de la diplomacia británica supuso una afrenta para el emperador que decidió apresar al embajador británico, Charles Cameron, y junto a la mayoría de los extranjeros que vivían en su territorio –algunos representantes británicos, comerciantes franceses y misioneros alemanes-, convertirlos en rehenes.
Los esfuerzos diplomáticos por liberar a los europeos en manos del emperador Theodoros II se prolongaron durante años sin éxito hasta que en el verano de 1867 Gran Bretaña declara la guerra al emperador.
Los preparativos de esta ofensiva fueron muy complicados ya que los británicos desplazaron desde la India 32.000 hombres y 55.000 animales de carga, entre ellos 40 elefantes para el transporte de artillería.
La expedición bajo el mando de Sir Robert Napier necesitó seis meses para llegar a su objetivo y enfrentarse en Magdala, la capital del imperio de Theodoros II a los etíopes.
La derrota de los etíopes fue total y el emperador dejó que los rehenes se reunieran con las tropas británicas. Tras un último intento de defender la ciudad Theodoros II se suicidó con una pistola regalo de la Reina Victoria durante las largas negociaciones para liberar a los rehenes.
Esta expedición británica pasó a la historia por las dificultades de logística que presentaba el introducir un ejército en un territorio africano apenas explorado para lo que los europeos construyeron desde muelles, malecones y almacenes en el puerto de Zula, hasta una línea de ferrocarril con unos 30 km. de vía.