Antecedentes
Para comprender la actitud del campesinado vasco en las Guerras Carlistas hay que tener en cuenta la experiencia adquirida en los episodios bélicos precedentes, tanto a nivel político (relación con el liberalismo) como a nivel bélico (experiencia en la guerra de guerrillas).
Primera Guerra Carlista
Se desarrolló entre 1833 y 1839 entre los defensores de los derechos dinásticos del infante Don Carlos y los de su sobrina Isabel. El primero recibió el apoyo de los absolutistas, la segunda el de los liberales.
Zumalacárregui convirtió unos grupos dispersos de campesinos sublevados en un verdadero ejército al servicio de Don Carlos. “Don Carlos, Zumalacareguy and the Staff”. Museo Zumalakarregi |
Isabel II contó con el ejército español para la defensa de su acceso al trono. “Queens Infantry”. Museo Zumalakarregi |
Potencias Europeas
Como consecuencia del Tratado de la Cuádruple Alianza, firmado en abril de 1834 entre Gran Bretaña, Francia, Portugal y España, Francia se comprometió a vigilar sus fronteras para que los carlistas no recibiesen auxilios por ellas; Inglaterra a enviar armas y municiones, así como fuerzas navales para controlar la costa vasca y Portugal a cooperar con todos los medios a su alcance. En 1835 las tres potencias enviaron tropas para apoyar la causa liberal. Gran Bretaña la Legión Auxiliar Británica, compuesta por unos 12.000 voluntarios. Francia la Legión Extranjera con unos 5.000 hombres y Portugal con un cuerpo del ejército de unos 6.000 soldados.
Segunda Guerra Carlista
Se desarrolló entre 1872 y 1876 bajo el liderazgo de un nuevo pretendiente, Carlos VII.